Un retiro escondido entre viñedos y mar turquesa
Entre colinas suaves y campos perfumados de lavanda, emerge un refugio encantador donde el estilo provenzal se encuentra con el lujo relajado. Esta villa, situada a sólo minutos del resplandeciente mar Mediterráneo, invita a desconectarse del bullicio y sumergirse en el puro deleite sensorial de la campiña francesa.
Sabores que celebran la tierra y el mar
En su terraza bañada por el dorado sol del atardecer, los aromas de hierbas frescas y pan recién horneado se mezclan con la brisa marina. El menú, diseñado por chefs locales, resalta ingredientes de temporada: tomates maduros, quesos artesanales y pescados recién salidos del mar. Todo maridado con vinos orgánicos cosechados en viñedos vecinos.
Diseño con alma y autenticidad
El interior de la villa combina muros de piedra cálida con maderas nobles y textiles naturales en tonos tierra. Cada rincón ha sido cuidadosamente curado para evocar serenidad: desde los sillones tapizados en lino hasta las antigüedades recuperadas de mercados locales. La decoración respira autenticidad con un guiño contemporáneo que encanta.
Bienestar en clave mediterránea
Los días transcurren lentamente entre baños en la piscina de agua salada, masajes con aceites esenciales regionales y caminatas matutinas entre olivos centenarios. Aquí, el tiempo se ralentiza y la vida se saborea con calma, conectando cuerpo, mente y espíritu con el entorno natural que lo abraza todo.