– El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzó un ultimátum a 17 compañías farmacéuticas, otorgándoles un plazo de 60 días para garantizar que los nuevos medicamentos se vendan al mejor precio posible dentro del país. De no cumplirse esta exigencia, advirtió que su administración aplicará represalias directas contra estas empresas.
La medida se enmarca en una ofensiva más amplia para reducir los elevados costos de los medicamentos recetados en Estados Unidos, donde, según datos oficiales, los precios triplican en promedio a los que se pagan en países desarrollados con sistemas de salud comparables.
“Los precios de los medicamentos son simplemente inaceptables. Hemos firmado cartas directas a los CEOs de las empresas farmacéuticas más grandes. Es hora de que los estadounidenses paguen lo mismo o menos que otros países”, afirmó Trump.
Política de “nación más favorecida”
Trump reafirmó su respaldo a la política de “nación más favorecida”, que vincula el precio de los medicamentos en el mercado estadounidense con el precio más bajo disponible en otros países. Según esta propuesta, ningún medicamento debería costar más en Estados Unidos que en el país extranjero donde se vende al menor precio.
El expresidente también instó a las farmacéuticas a extender esta política a los fármacos cubiertos por programas públicos como Medicaid, los cuales atienden a personas mayores, discapacitadas y de bajos ingresos.
Presión directa a la industria
La advertencia no es simbólica. Trump indicó que su equipo ya envió comunicaciones oficiales a los directores ejecutivos de las principales compañías farmacéuticas, con el fin de ejercer presión directa para lograr cambios inmediatos en la estructura de precios.
El expresidente había firmado en mayo un decreto ejecutivo sobre el tema, en el cual sugirió que una reducción del “50% sería un mal número”, dejando entrever que espera recortes aún más significativos en los precios que pagan los consumidores estadounidenses.
Un tema central en su agenda
La postura crítica de Trump hacia el sector farmacéutico no es nueva, pero este nuevo anuncio representa un paso más agresivo en su estrategia para reformar el sistema de salud desde el poder Ejecutivo. Con esto, el exmandatario retoma un tema central de su agenda política: la defensa del consumidor estadounidense frente a lo que ha calificado como “abusos de la industria”.
El desenlace de este ultimátum marcará un momento clave para las relaciones entre el Estado y el sector farmacéutico, en un contexto donde millones de estadounidenses continúan enfrentando dificultades para costear tratamientos esenciales.
Fuente: AFP – Declaración pública del expresidente Donald Trump – 1 de agosto de 2025